Descripción del libro
"Manual del discipulado" pretende ayudar a la creación de pequeños grupos de discipulado con la misión de multiplicarse. La visión que hay detrás de esta herramienta es lograr una red de discípulos que se extienda de generación en generación.
Para muchos, el discipulado es el seguimiento que una persona más madura en la fe hace de una persona menos madura, así que estaríamos hablando de una relación como la de maestro y alumno, o como la de padre e hijo. Cuando elaboré el material del "Manual del discipulado lo probé en varios contextos. Hasta ese momento mi concepto del discipulado había sido el que acabo de describir. Pero además de probar este material para enseñar a una persona joven en la fe, también lo probé con un grupo de tres personas (yo incluido), y con un grupo de diez. Y me quedé sorprendido por las diferencias que pude observar en cuanto a la dinámica. Después de mucha experiencia, he llegado a la conclusión de que los grupos de tres o cuatro personas es el mejor contexto para hacer un discipulado.
El "Manual del discipulado" puede usarse en un variado número de contextos (estudio personal, dos personas, tres personas, diez personas), pero sea cual sea el contexto, la persona clave es aquella que enseña. Las herramientas no son las que hacen a los discípulos. Dios obra a través de discípulos suyos para que los que necesitan madurar tengan un modelo de lo que es la vida en Cristo.
Los estudios más recientes en el campo de la enseñanza secular revelan que la presencia de un modelo sigue siendo la dinámica de aprendizaje más importante. En el desarrollo de la conducta humana, “la motivación de parecerse a una persona que admiramos” está por encima de la coacción y la recompensa. El nivel más bajo de aprendizaje es el de la sumisión o conformidad, cuando una persona controla a la otra. El segundo nivel es la identificación. Puede haber influencia porque existe el deseo de que la relación sea satisfactoria. El tercer nivel y el más alto es el de la interiorización, porque la conducta deseada se ha convertido de forma intrínseca en algo gratificante. Cuando se ofrece un modelo se crea un ambiente que afectará a los valores, las actitudes y la conducta.
A continuación, incluimos algunas de las funciones específicas del que enseña:
La primera función, que además es una función clave, es invitar a las personas a formar parte de una relación de discipulado. Tiene que explicarles en qué va a consistir no solo el curso, sino ese tipo de relación; explicarles qué compromisos van a adquirir y firmar el pacto que aparece en la página 14, “El pacto del discípulo”. Así, el que enseña se convierte en el “guardián del pacto”. El proceso del discipulado no debería comenzar hasta que el discípulo haya orado sobre el tema y haya firmado el pacto. Si no hay un pacto, un acuerdo, unos compromisos, los demás miembros del grupo no podrán pedirle cuentas. Durante el curso hay diferentes herramientas para que el que enseña pueda ejercer esta función. Después de las lecciones ocho y dieciséis aparece un apartado titulado “¿Cómo vamos?” que sirve para revisar el pacto inicial. El objetivo de este apartado después de la lección veinte es considerar en oración a qué persona/s podríamos invitar para iniciar otro grupo de discipulado cuando el nuestro llegue al final.
Inicialmente, el que enseña es el que lidera y guía al grupo. Su papel es guiar a los componentes a través del contenido, y ayudarles a entender el formato de los encuentros. Las lecciones tienen un formato tan sencillo que en poco tiempo todos se sentirán familiarizados con él. Cuando el grupo haya llegado a un cuarto o un tercio del contenido, los miembros pueden turnarse la tarea de guiar los encuentros semanales, y así prepararse para llevar un grupo en un futuro próximo.
El que enseña tiene que hacer las tareas, al igual que los demás componentes del grupo. Aunque él o ella será quien haga las preguntas y anime a los demás a compartir lo que han respondido, también deberá compartir su respuesta, ser uno más a la hora de aportar los descubrimientos que ha podido hacer como fruto de las tareas asignadas.
El que enseña tiene que ser un modelo de transparencia y compartir sus luchas, sus preocupaciones y temas de oración, y confesar su pecado. No es necesario que tenga todas las respuestas a las preguntas bíblicas y teológicas. Una buena actitud es reconocer que no se sabe todo, pero estar dispuesto a investigar, y decir algo como “No lo sé, pero intentaré encontrar la respuesta”. El modelo que está ofreciendo no será eficaz si lo basa en un falso perfeccionismo. El que enseña sigue estando en un proceso de aprendizaje sobre la Biblia y la vida cristiana, del mismo modo que los que están siguiendo el discipulado por primera vez.
El Manual del discipulado ha sido diseñado para hacer una lección por semana, en una sesión de una hora y media. Obviamente, eso variará según el estilo de aprendizaje, la profundidad de las cuestiones personales que se estén compartiendo, y los lapsos que se dediquen a responder a cuestiones que surjan a medida que se va haciendo el estudio. Recordad que la idea de un grupo pequeño de discipulado como el que proponemos es avanzar a un ritmo que se adecue a los participantes. No os sintáis obligados a contestar cada una de las preguntas. Es mejor que uséis este libro como un menú del que elegir lo que va a ser de mayor provecho, sobre todo si hay cosas del contenido que ya se saben o los miembros ya las han incorporado a su vida diaria.
Las tareas deben realizarse de forma completa e individual antes de los encuentros con el resto del grupo. Todas las lecciones contienen los siguientes apartados:
Enseñanza principal: La enseñanza principal sirve como el principio a partir del cual se construirá toda la lección. El resto del capítulo está diseñado para explicar dicho principio bíblico.
Versículo para memorizar: Cuando aprendemos fragmentos de la Biblia de memoria, poco a poco conseguimos que la visión que Dios tiene de la vida se convierta en nuestra visión. El salmista escribe: “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti” (Salmo 119:11). Esta disciplina hará que estemos arraigados en la Verdad, servirá para que podamos animar a otros hermanos con la Palabra de Dios, y nos ayudará a compartir nuestra fe con los demás. Y, por encima de todo eso, nos llevará a ser más como Cristo. Estos versículos deberían revisarse aproximadamente cada seis lecciones.
Estudio bíblico inductivo: La Biblia es la fuente indiscutible para descubrir y conocer la realidad. Nuestro interés no estará en almacenar conocimiento, sino que el objetivo de este estudio bíblico será ir conociendo la realidad y, con la ayuda del poder de Dios, hacer que nuestras vidas estén en consonancia con ella. Larry Richards ha resumido muy bien la relación que hay entre la Palabra de Dios y el concepto de realidad: “En la Palabra de Dios, el Espíritu de Dios ha revelado la verdadera naturaleza del mundo en el que vivimos, la verdadera naturaleza del ser humano y de Dios, la consumación última de la Historia, el funcionamiento de las relaciones, y las reacciones ante Dios y ante la vida; y cada una de estas revelaciones se corresponde con el estado real de las cosas, con la realidad”.
Lectura: Cada lección finaliza con una enseñanza cuyo objetivo es ofrecer una aplicación de la verdad eterna con la que se ha iniciado la lección. La aplicación servirá para que esa verdad nos rete y estimule nuestro pensamiento. Las preguntas que aparecen a continuación de la lectura nos ayudarán a ser concretos.
"Manual del discipulado" pretende ayudar a la creación de pequeños grupos de discipulado con la misión de multiplicarse. La visión que hay detrás de esta herramienta es lograr una red de discípulos que se extienda de generación en generación.
Para muchos, el discipulado es el seguimiento que una persona más madura en la fe hace de una persona menos madura, así que estaríamos hablando de una relación como la de maestro y alumno, o como la de padre e hijo. Cuando elaboré el material del "Manual del discipulado lo probé en varios contextos. Hasta ese momento mi concepto del discipulado había sido el que acabo de describir. Pero además de probar este material para enseñar a una persona joven en la fe, también lo probé con un grupo de tres personas (yo incluido), y con un grupo de diez. Y me quedé sorprendido por las diferencias que pude observar en cuanto a la dinámica. Después de mucha experiencia, he llegado a la conclusión de que los grupos de tres o cuatro personas es el mejor contexto para hacer un discipulado.
El "Manual del discipulado" puede usarse en un variado número de contextos (estudio personal, dos personas, tres personas, diez personas), pero sea cual sea el contexto, la persona clave es aquella que enseña. Las herramientas no son las que hacen a los discípulos. Dios obra a través de discípulos suyos para que los que necesitan madurar tengan un modelo de lo que es la vida en Cristo.
Los estudios más recientes en el campo de la enseñanza secular revelan que la presencia de un modelo sigue siendo la dinámica de aprendizaje más importante. En el desarrollo de la conducta humana, “la motivación de parecerse a una persona que admiramos” está por encima de la coacción y la recompensa. El nivel más bajo de aprendizaje es el de la sumisión o conformidad, cuando una persona controla a la otra. El segundo nivel es la identificación. Puede haber influencia porque existe el deseo de que la relación sea satisfactoria. El tercer nivel y el más alto es el de la interiorización, porque la conducta deseada se ha convertido de forma intrínseca en algo gratificante. Cuando se ofrece un modelo se crea un ambiente que afectará a los valores, las actitudes y la conducta.
A continuación, incluimos algunas de las funciones específicas del que enseña:
La primera función, que además es una función clave, es invitar a las personas a formar parte de una relación de discipulado. Tiene que explicarles en qué va a consistir no solo el curso, sino ese tipo de relación; explicarles qué compromisos van a adquirir y firmar el pacto que aparece en la página 14, “El pacto del discípulo”. Así, el que enseña se convierte en el “guardián del pacto”. El proceso del discipulado no debería comenzar hasta que el discípulo haya orado sobre el tema y haya firmado el pacto. Si no hay un pacto, un acuerdo, unos compromisos, los demás miembros del grupo no podrán pedirle cuentas. Durante el curso hay diferentes herramientas para que el que enseña pueda ejercer esta función. Después de las lecciones ocho y dieciséis aparece un apartado titulado “¿Cómo vamos?” que sirve para revisar el pacto inicial. El objetivo de este apartado después de la lección veinte es considerar en oración a qué persona/s podríamos invitar para iniciar otro grupo de discipulado cuando el nuestro llegue al final.
Inicialmente, el que enseña es el que lidera y guía al grupo. Su papel es guiar a los componentes a través del contenido, y ayudarles a entender el formato de los encuentros. Las lecciones tienen un formato tan sencillo que en poco tiempo todos se sentirán familiarizados con él. Cuando el grupo haya llegado a un cuarto o un tercio del contenido, los miembros pueden turnarse la tarea de guiar los encuentros semanales, y así prepararse para llevar un grupo en un futuro próximo.
El que enseña tiene que hacer las tareas, al igual que los demás componentes del grupo. Aunque él o ella será quien haga las preguntas y anime a los demás a compartir lo que han respondido, también deberá compartir su respuesta, ser uno más a la hora de aportar los descubrimientos que ha podido hacer como fruto de las tareas asignadas.
El que enseña tiene que ser un modelo de transparencia y compartir sus luchas, sus preocupaciones y temas de oración, y confesar su pecado. No es necesario que tenga todas las respuestas a las preguntas bíblicas y teológicas. Una buena actitud es reconocer que no se sabe todo, pero estar dispuesto a investigar, y decir algo como “No lo sé, pero intentaré encontrar la respuesta”. El modelo que está ofreciendo no será eficaz si lo basa en un falso perfeccionismo. El que enseña sigue estando en un proceso de aprendizaje sobre la Biblia y la vida cristiana, del mismo modo que los que están siguiendo el discipulado por primera vez.
El Manual del discipulado ha sido diseñado para hacer una lección por semana, en una sesión de una hora y media. Obviamente, eso variará según el estilo de aprendizaje, la profundidad de las cuestiones personales que se estén compartiendo, y los lapsos que se dediquen a responder a cuestiones que surjan a medida que se va haciendo el estudio. Recordad que la idea de un grupo pequeño de discipulado como el que proponemos es avanzar a un ritmo que se adecue a los participantes. No os sintáis obligados a contestar cada una de las preguntas. Es mejor que uséis este libro como un menú del que elegir lo que va a ser de mayor provecho, sobre todo si hay cosas del contenido que ya se saben o los miembros ya las han incorporado a su vida diaria.
Las tareas deben realizarse de forma completa e individual antes de los encuentros con el resto del grupo. Todas las lecciones contienen los siguientes apartados:
Enseñanza principal: La enseñanza principal sirve como el principio a partir del cual se construirá toda la lección. El resto del capítulo está diseñado para explicar dicho principio bíblico.
Versículo para memorizar: Cuando aprendemos fragmentos de la Biblia de memoria, poco a poco conseguimos que la visión que Dios tiene de la vida se convierta en nuestra visión. El salmista escribe: “En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti” (Salmo 119:11). Esta disciplina hará que estemos arraigados en la Verdad, servirá para que podamos animar a otros hermanos con la Palabra de Dios, y nos ayudará a compartir nuestra fe con los demás. Y, por encima de todo eso, nos llevará a ser más como Cristo. Estos versículos deberían revisarse aproximadamente cada seis lecciones.
Estudio bíblico inductivo: La Biblia es la fuente indiscutible para descubrir y conocer la realidad. Nuestro interés no estará en almacenar conocimiento, sino que el objetivo de este estudio bíblico será ir conociendo la realidad y, con la ayuda del poder de Dios, hacer que nuestras vidas estén en consonancia con ella. Larry Richards ha resumido muy bien la relación que hay entre la Palabra de Dios y el concepto de realidad: “En la Palabra de Dios, el Espíritu de Dios ha revelado la verdadera naturaleza del mundo en el que vivimos, la verdadera naturaleza del ser humano y de Dios, la consumación última de la Historia, el funcionamiento de las relaciones, y las reacciones ante Dios y ante la vida; y cada una de estas revelaciones se corresponde con el estado real de las cosas, con la realidad”.
Lectura: Cada lección finaliza con una enseñanza cuyo objetivo es ofrecer una aplicación de la verdad eterna con la que se ha iniciado la lección. La aplicación servirá para que esa verdad nos rete y estimule nuestro pensamiento. Las preguntas que aparecen a continuación de la lectura nos ayudarán a ser concretos.
- Información adicional
Información adicional
Autor Ogden, Gregory J. Peso 371.9520 Medidas 14 x 23 cm Páginas 290 Encuadernación Rústica fresada Idioma es
-
10. Curso de Formación Teológica Evangélica: Ética Cristiana
Precio Habitual: 13,99 $
Special Price 13,29 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-7228-176-9
Ética, en general, es la ciencia que estudia y analiza el comportamiento y conducta del ser humano. Busca y establece los principios morales según los cuales cada individuo procura determinar sus reacciones y actuaciones en cada una de las distintas situaciones que se le presentan en la vida. Ética Cristiana es la aplicación a estos principios de las enseñanzas de la Escritura. Este libro se ha escrito con el propósito de ayudar a los estudiantes de teología y a los creyentes en general a discernir y cimentar sus criterios de valoración ética acuerdo a una base bíblica.
-
Cristianismo auténtico
Precio Habitual: 15,99 $
Special Price 15,19 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-824-5
Johann Arndt (1555-1621) fue un teólogo luterano alemán nacido en Sajonia (Ballenstedt, Anhalt) considerado como uno de los precursores del pietismo.
Su libro “Cristianismo Auténtico” generó un despertar hacia una vida cristiana más consecuente fomentando, así, los inicios del movimiento pietista. Los escritos de Arndt influenciaron a J. Edwards (1703-1758), G. Whitefield (1714-1770), y J. Wesley (1707-1778) dando lugar a los movimientos metodistas y evangélicos, que a principios del Siglo XX derivaron en los movimientos carismáticos y pentecostales; lo que hoy en día son las Asambleas de Dios y demás movimientos e iglesias pentecostales.
Inspirado, entre otros, por el monje Tomás de Kempis (1380-1471), los escritos de Arndt, básicamente espirituales místico-piadosos, fomentan el desarrollo individual a través del estudio de la Biblia, la oración y la meditación.
Hoy, la sociedad del Siglo XXI defraudada por el consumismo capitalista y desorientada por el fracaso de los conceptos relativistas de la postmodernidad busca desesperadamente una salida espiritual en el misticismo.
Por ello, animamos al público en general a dejarse seducir por esta obra y a saborear su esencia.
«Mi propósito es mostrar al lector llano en qué consiste el verdadero cristianismo, a saber, en la exhibición de una fe verdadera, viva y activa, la cual se manifiesta en una genuina piedad y en los frutos de justicia… nos llamamos cristianos, no solo porque creemos en Cristo, sino también porque el nombre de cristiano implica que vivimos en Cristo, y Cristo vive en nosotros» -
La Peregrina
Precio Habitual: 5,99 $
Special Price 5,69 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-538-1
Versión actualizada y con el texto completo de la SEGUNDA PARTE de la obra inmortal de John Bunyan The Pilgrim's Progress - El Progreso del Peregrino, en la que se ha preservando la integridad del texto original, manteniendo la calidad y valor literario de la versión española y respetando la magistral traducción poética de Carlos Araujo.
Su objetivo es acercar la obra alegórica de Bunyan bajo el símil de un sueño: El viaje de de Cristiano y Cristiana desde "Ciudad de Destrucción" a "Ciudad Celestial" a los lectores del siglo XXI. Una joya, no sólo de la literatura cristiana inglesa, sino de todas las lenguas. -
El Peregrino
Precio Habitual: 5,99 $
Special Price 5,69 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-536-7
Versión actualizada y con el texto completo de la PRIMERA PARTE de la obra inmortal de John Bunyan The Pilgrim's Progress - El Progreso del Peregrino, en la que se ha preservando la integridad del texto original, manteniendo la calidad y valor literario de la versión española y respetando la magistral traducción poética de Carlos Araujo.
Su objetivo es acercar la obra alegórica de Bunyan bajo el símil de un sueño: El viaje de de Cristiano y Cristiana desde "Ciudad de Destrucción" a "Ciudad Celestial" a los lectores del siglo XXI. Una joya, no sólo de la literatura cristiana inglesa, sino de todas las lenguas. -
19. Discipulado que transforma: El modelo de Jesús
Precio Habitual: 14,99 $
Special Price 14,24 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-467-4
Con el deseo de que la iglesia crezca, muchos de nuestros líderes siempre están pendientes de las últimas estrategias evangelísticas. Pero si en nuestras iglesias no hay crecimiento, quizá no sea porque no nos preocupemos de las personas nuevas, sino porque no estamos discipulando a los miembros de forma eficaz.
Muchas veces nuestras iglesias no tienen un plan coherente de discipulado y los líderes creen que no tienen los suficientes recursos para animar a sus miembros a ser verdaderos seguidores de Cristo. Greg Odgen habla de la necesidad del discipulado en las iglesias locales y recupera el modelo de Jesús: invertir en un grupo pequeño de personas para que sus vidas sean transformadas y que así ellas puedan ayudar a otros a caminar hacia la madurez en Cristo. Odgen habla mucho de la transformación; no solo de la transformación de los discípulos, sino también del concepto del discipulado. Según él, el discipulado debería convertirse en un proceso que se pueda transmitir y, así, tener un impacto a través de las generaciones.
Bíblico, práctico y enormemente eficaz, este acercamiento al discipulado ya se ha usado con mucho éxito en cientos de iglesias en los EEUU., y también en Europa. Un discipulado que transforme vidas puede ayudar a tu iglesia a transformar la vida de sus miembros. -
Salón de belleza para el cristiano
Precio Habitual: 13,00 $
Special Price 12,35 $
ISBN: 978-84-8267-141-3
¿A quién no le gustaría mejorar su imagen? ¿Potenciar su belleza? ¿Dejar de ser un patito feo y transformarse en un hermoso y elegante cisne?
Afortunadamente, hoy esto es posible. Gracias a los Salones de Belleza, tan de moda en la actualidad, y a los Técnicos Asesores de Imagen, unos profesionales que corrigen nuestro aspecto físico y nuestra indumentaria a fin de hacernos más atractivos, podemos mejorar sensiblemente la impresión que causamos en los demás... Sin embargo, hay una belleza mucho más importante e imperecedera que la física, la cual no tiene precio, ni puede manipularse con artificios y maquillaje, sino que debe cultivarse en el jardín del alma: la belleza espiritual...
A ésta es la clase de belleza a la que apunta Leroy Koopman en este interesante libro: Salón de Belleza para el cristiano. A través de una ocurrente analogía, intenta situar al lector en una especie de "Salón de Belleza" espiritual, en el cual se ofrecen sesiones teóricas y prácticas en este sentido y se realizan una serie de terapias con recetas y ejercicios prácticos que nos ayudan a mejorar el aspecto de nuestra: lengua, orejas, manos y pies; potenciando las cualidades espirituales y disminuyendo los defectos de nuestro carácter.
Estamos, pues, en las manos del mejor profesional de todos, el Espíritu Santo; el único capaz de cambiar nuestro corazón de piedra y convertirlo en uno de carne rosada y saludable, que atraerá, a su vez, a otros corazones deteriorados a los pies del Salvador.
Y como en todo Salón de Belleza, uno puede acudir en solitario o en compañía, en el secreto de la privacidad individual o compartiendo con otros las experiencias de sus mejoras y apoyándose mutuamente en los ejercicios más difíciles. Por ello, este libro está ideado tanto para una lectura individual como para ser utilizado a modo de manual en grupos celulares.
Nuestro deseo es que la lectura cumpla las expectativas expuestas, que no son para vanagloria personal, sino para honra y gloria de nuestro Padre Creador, el cual nos diseñado a su imagen y semejanza y nos amonesta a ser templos de su Espíritu Santo (Gn. 1:26; 1 Co. 6:19 y 20) -
Pies de Ciervas en los lugares altos
Precio Habitual: 5,99 $
Special Price 5,69 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-472-8
Con más de 2.000.000 de ejemplares vendidos es una de las obras alegóricas mas leídas y más conocidas de la literatura cristiana.
Dramatiza el anhelo del creyente de elevarse y ser conducido por Cristo a las cumbres del amor, el gozo y la victoria:
Cuenta las aventuras de «Miedosa». De como escapó de la vigilancia de sus parientes, los «Temerosos», y se fue en compañía del« Rey-Pastor» a los Lugares Altos, en cuyas cumbres halló el "perfecto amor echa fuera el temor". Allí se gana un nombre nuevo y unos "pies de ciervas" que la capacitan para saltar de una cumbre a otra.
Con todo ello personifica las actitudes de la mente, del corazón y del carácter, factores que hacen tambalear al cristiano en su viaje hacia «los lugares altos» más cercanos a Dios. -
El Cristiano de rodillas
Precio Habitual: 5,99 $
Special Price 5,69 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-537-4
El valor y calidad de este libro no precisa de muchas explicaciones, ya que viene avalado por su éxito y probado por el número de ejemplares impresos y distribuidos desde que saliera a la luz. Ha producido mejores resultados en la vida de oración de millones de cristianos que cualquier otra cosa que se haya escrito hasta la fecha.
Aunque firmado como escrito por "Un cristiano anónimo", parece demostrado que "El cristiano de rodillas" fue escrito en el período comprendido entre las dos guerras mundiales 1914-1944, probablemente entre 1920-1930 por el pastor anglicano Albert Earnest Richardson.
Su autor demuestra estar muy versado en las Escrituras, y con ellas en la mano, su objetivo es retar al lector a confrontar su vida de oración con la enseñanza que hallamos en la Palabra de Dios acerca de la misma. Adentrarse en sus páginas es:
Poner a a prueba tu primer amor tan arraigados en Cristo.
Poner a prueba en grado de alabanza en nuestras oraciones.
Poner a a prueba su regularidad y persistencia.
Poner a prueba su continuidad e insistencia.
Va analizando todos las posibles dificultades y obstáculos en nuestra vida de oración y derribándolos uno tras otro
Dedica todo un capítulo al tema importante de "quién" esta capacitado para orar. Si nos preguntaran ahora mismo, la mayoría de nosotros respondería con rapidez: "cualquiera". Pero después de leer este libro, probablemente opinaremos de otra forma. La oración genuina y sincera –afirma el autor– llega sin duda hasta el corazón de Dios, pero asegurarnos de que nuestra oración es realmente genuina y sincera, no es tan fácil como parece.
Un análisis breve pero completo al tema de la oración, sus promesas, sus señales, sus obstáculos, la forma de usarla, sus respuestas y sus resultados. -
Formación Espiritual
Precio Habitual: 14,99 $
Special Price 14,24 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-551-0
Todos deseamos crecer espiritualmente, pero necesitamos ayuda. Este libro es una herramienta muy útil que le dará una orientación bíblica y práctica para su formación espiritual. Le explicará como usar las disciplinas espirituales como la oración, la lectura bíblica, la meditación, el ayuno, y el retiro espiritual. Le guiará en el desarrollo de una relación de mentor con otro cristiano, y le animará en su relación personal con Cristo. -
El Verdadero Discipulado
Precio Habitual: 10,99 $
Special Price 10,44 $
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-453-7
Este libro es el resultado de un esfuerzo especial por parte de William MacDonald, apreciado expositor bíblico y conocido en todo el mundo cristiano a través de su Comentario a toda la Biblia, para sentar las bases de algunos principios importantes sobre el discipulado cristiano que encontramos claramente expuestos en el Nuevo Testamento.
“En realidad –dice- se trata de principios bíblicos bien conocidos y de los cuales hemos tenido conocimiento a través de la Palabra por muchos años; pero que debido a su radicalidad, la mayoría de creyentes no aplican en sus vidas por considerarlos impracticables en la complicada época en la que vivimos. Esta actitud esta dejando a la Iglesia cristiana sepultada bajo una gruesa capa de hielo que amenaza en convertirse en una auténtica Era Glacial en el sentido espiritual”
El discipulado cristiano tal como que se expone en estas páginas, exige vivir una vida sobrenatural que dentro de nosotros mismos no tenemos poder para vivir. Necesitamos del poder de Dios para poder actuar en el mundo como el Señor Jesús enseñó.
En veintiún capítulos, que cubren el tema en toda su amplitud, desde las condiciones del discipulado hasta su recompensa, William MacDonald, haciendo gala una vez más de su don de gran expositor, explica, paso a paso cómo conseguirlo.
Incluye una excelente Guía de Estudio pensada tanto para su utilización como libro de texto en pequeños grupos como par el uso personal.