Nuño, Daniel
En Vilanova, toda la familia contribuyó para el establecimiento de una iglesia evangélica en la ciudad. Hilario, el padre de Daniel, fue anciano de la iglesia y un estrecho colaborador de los diferentes pastores que hubieron hasta su muerte (1958). Muy pronto, Daniel manifestó sus inquietudes para el ministerio cristiano. En sus largos años de servicio al Señor y a su iglesia, y en tiempos muy difíciles, ha participado en la administración de la iglesia, como maestro, predicador, anciano, lider de jóvenes, músico, director del coro, decorador, y por un periodo de cinco años (1981-86) como pastor de la iglesia. Actualmente, ya jubilado, sigue como colaborador en algunos ministerios de la iglesia.
Daniel Nuño despertó su vocación poética, como en muchas ocasiones, con motivo de su noviazgo con la que después sería su esposa, Carmeta. Ella fue su "musa" particular. Pero esta vocación enseguida se trasladó al campo cristiano. Empezó a elaborar poesías y diálogos para las fiestas locales de la iglesia evangélica de Vilanova (Navidad, Día de la Madre, Fin de curso, etc.). Al cabo de un tiempo había juntado tanto material que el fundador de la misma iglesia, Samuel Vila, y director de la que entonces era la editorial CLIE, publicó su primer libro de poesías en 1969, Enciclopedia de poesía evangélica. Y así comenzó una saga de publicaciones hasta completar un numero total de cinco: Poesías para la iglesia cristiana (1977), Ofrenda poética (1984), Poemas y diálogos para la iglesia (1992) y Poemas, reflexiones del alma (2000).
Fuente: adorador.com
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Mujeres reales
En la Biblia se menciona a 2.930 personajes, de los cuales 196 son mujeres citadas por nombre propio. Aunque hay muchas más, identificadas por el nombre de sus maridos, su lugar de residencia, su oficio o su cometido. Algunas pasan casi desapercibidas pero otras desempeñaron papeles importantes en la vida política de los pueblos. Han transcurrido milenios, y han cambiado sustancialmente los tiempos y costumbres, pero las experiencias y sentimientos interiores del ser humano, sus éxitos y fracasos, alegrías y tristezas, sus afectos y odios, anhelos y esperanzas no cambian, son los mismos en el transcurrir de los siglos. Por tanto –afirma la autora– entre las mujeres de la Biblia y las mujeres del siglo xxi, aunque pueda sonar extraño, la realidad es que en el fondo son más las semblanzas que las diferencias, son más aquellas cosas que las unen que las que las separan.
Este libro pretende llevar a las mujeres de hoy al pozo donde sus vidas se cruzan con las de las mujeres bíblicas, donde sus éxitos, fracasos, problemas y satisfacciones se reflejan en la superficie cristalina del agua: unas nadando en la abundancia, otras ahogándose en la pobreza, unas madres, otras estériles, unas dirigentes, otras dirigidas, unas manipuladas, otras manipuladoras. Todas ellas cuentan su historia y son dignas de escucha, porque sus vivencias y experiencias pueden aportar mucha luz y consuelo cuando se atraviesan momentos difíciles, sea cual sea nuestra edad, estado civil o condición social.
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Manual de Predicación Expositiva
¡Si buscas una guía condensada para la predicación bíblica, este es el libro para ti! Escrito por Luis Miguel Contreras con el propósito de ayudar a todo cristiano en el área más importante de su vida diaria, crecer en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo (2 P. 3:18), al estudiar y aplicar correctamente las Escrituras. -
Diccionario de Jesús y los Evangelios
Una buena manera de describir la naturaleza y propósito de esta obra es comparándola al famoso “Dictionary of Christ and the Gospels” de James Hastings (1852–1922), publicado en 1906. Las funciones que la monumental obra que Hastings llevó a cabo con éxito a principios del siglo xx fueron:
-Aportar un tratamiento erudito y equilibrado de la cristología y demás temas históricos y teológicos registrados en los cuatro Evangelios, en el que el mundo evangélico pudiera basar, argumentar y vivir su fe en franco diálogo con las propuestas liberales de la alta crítica.
-Tender un puente entre la alta erudición del mundo académico contemporáneo y las necesidades prácticas de conocimiento y consulta en el mundo evangélico por parte de pastores, maestros, estudiantes y todo aquel que necesita entrar a fondo en el estudio puntual de un tema dentro el texto bíblico y acceder al debate académico contemporáneo sobre el mismo de una manera fácil, evitando largas horas de lectura de gruesos y farragosos volúmenes.
Desde los días de Hastings, la crítica contemporánea ha puesto sobre la mesa muchos cuestionamientos nuevos e inéditos al texto de los Evangelios. De otra parte, nuestros conocimientos acerca del judaísmo de los tiempos de Jesús han avanzado hasta niveles entonces poco previsibles. Y los avances en comunicación, han complicado el problema. Temas como “la búsqueda” del Jesús histórico, que en aquella época quedaban circunscritos a las revistas técnicas y monografías académicas, hoy en día a través de Internet, son asequibles a cualquiera. Era imprescindible, por tanto, una obra de carácter similar, pero puesta al día, que aportara respuestas a los problemas actuales. Y el presente Diccionario de Jesús y los evangelios viene a llenar con creces esta necesidad.
Ha sido pensado y escrito para satisfacer todas las necesidades de la comunidad ministerial cristiana. A los estudiantes les proporciona debates introductorios y amplia información sobre cada tema. A los pastores y maestros material adecuado y fiable para sus clases y sermones. A los teólogos y eruditos bíblicos una puesta al día sobre las más recientes tendencias vistas desde una posición netamente evangélica.
Algunos de los artículos, proporcionan información de fondo muy importante. Sitúan cada hecho y cada palabra de Jesús en su contexto histórico y cultural, permitiendo una mejor comprensión de las mismas y aportando un material valiosísimo a pastores y maestros a la hora de explicarlas.
Otros artículos abordan cuestiones más técnicas o más recientes y menos conocidas acerca de Jesús y los evangelios, como por ejemplo: el hombre divino, la retórica antigua y los chreiai (aforismos) etc. Sin olvidar muchos de especial interés para la Iglesia hoy como: la sanidad divina, las posesiones demoníacas, la glosolalia, los dones espirituales, etc. Y por supuesto, todos lo relativo a los evangelios y escritos apócrifos. Toda la información que aporta es amplia y bien referenciada, incluyendo las menciones a fuentes extra-bíblicas; y la variedad de los artículos asombrosa: mitología griega y romana, geografía, economía, sueños y visiones, canciones e himnos, y un largo etc., puede decirse que nada que tenga que ver con Jesús y los evangelios se queda en el tintero.
Una de las secciones que más útil resulta y que más apreciarán los pastores a nivel práctico, es la que dedica a la predicación en los tiempos bíblicos y cómo utilizar los textos del Evangelio en la preparación de sermones. El artículo sobre la “interpretación teológica de los Evangelios” por Andy Johnson es una verdadera obra de arte y debería ser de lectura obligatoria para todos los estudiantes de teología. Y así sucesivamente. El sistema de referencias cruzadas, que llevan al lector de un artículo a otro dentro del mismo tema, impresionante y muy eficaz, el proceso se seguimiento es completísimo. Todos los artículos cuentan con su propia bibliografía individual para poder profundizar en el tema; a lo que se suma un valioso juego de índices, muy bien concebido y trabajado. -
Pack Grandes Pensadores
Le presentamos este pack, una fusión de lecciones de seis grandes pensadores y autores cristianos. -
De Pastor a Pastor
Una de las frases más comentadas del nuevo Papa Francisco, y más aireadas por los medios de comunicación para demostrar el nuevo talante de la Iglesia Católica bajo su mandato, fue: «La Iglesia necesita pastores con olor a oveja». El autor del presente libro llega exactamente a la misma conclusión, solo que mucho antes que Jorge Mario Bergoglio, y en un contexto muy distinto, el de las iglesias evangélicas de Brasil, que es donde ejerce su propio ministerio pastoral.
Su mensaje es que la Iglesia contemporánea precisa de un gran despertamiento espiritual en la vida de los pastores Necesita pastores que amen a Dios más que a su éxito personal; que estudien a fondo la Palabra y traigan alimento nutritivo al pueblo; que vivan en oración y sean ejemplo de piedad para el rebaño. Pastores que den la vida por las ovejas en lugar de explotar la grey; que no se doblen al pragmatismo ni vendan su conciencia por dinero o éxito. Pastores fieles y no pastores populares; hombres quebrantados y no astros ensimismados. Pastores que entiendan su misión y valoren su trabajo haciendo suya suyas las palabras de C. H. Spurgeon a sus estudiantes: «Hijos míos, si la reina de Inglaterra os invita para que seáis embajadores en cualquier país del mundo, no os rebajéis de puesto, dejando de ser embajadores del Rey de reyes y del Señor de señores».
Por desgracia, la realidad es muy distinta. En la constelación de la grey evangélica cada vez hay más estrellas, cada vez son más los pastores a los que gusta ser tratados como astros del cine y actores de televisión, olvidando que las estrellas brillan donde el sol no está brillando, y que donde brilla el Sol de Justicia no hay espacio para que brille el hombre. Dios no comparte su gloria con nadie. Toda gloria dada al hombre es vanagloria, y el culto a la personalidad es idolatría y una abominación para el Señor. En la Iglesia sólo Jesús puede ser admirado, honrado y exaltado.
Pese a toda esta denuncia, no estamos ante un libro crítico, sino todo lo contrario. Su objetivo no es tanto denunciar los errores y sus peligros, como aportar ideas para evitarlos y corregirlos. Su reflexión es que si bien los pastores son el principal problema de la obra, también son el instrumento principal para su crecimiento. Y su conclusión es que ¡necesitamos desesperadamente de un avivamiento en el púlpito!, pues como afirmaba D. L. Moody «el despertar de una iglesia empieza cuando se prende una hoguera en el púlpito». En “De pastor a pastor”, compagina el consejo de grandes hombres de Dios con sus experiencias, y concluye que antes de pastorear a los demás, el pastor debe pastorearse a sí mismo, antes de exhortar a otros debe exhortarse a sí mismo, antes de confrontar los pecados de otros tiene que confrontar los suyos propios.