-
Viaje a través del Antiguo Testamento Un método innovador para entender el A. T.
Me pregunto si Amós se sentiría (casi) tan halagado al encontrarse utilizado como trampolín para adentrarse en el Antiguo Testamento ¡como yo me siento al recibir el encargo de escribir un prefacio al estudio profundamente informado e informativo de Guillermo Cotton ¡Desde luego, yo me siento halagado! Durante mis años en Christchurch, Westbourne, Inglaterra, escuché en muchas ocasiones y desde muchas fuentes cuán profundamente el Profesor del Antiguo Testamento en el Colegio Bíblico de Moorlands estaba dedicado a su tema, cómo podía captar y despertar el interés en cada aspecto de sus ramificaciones y cuántas personas entraron en el ministerio cristiano dispuestos a compartir las riquezas que habían adquirido en sus clases.
Quiero, por tanto, enviar este libro por su camino, con la gozosa anticipación de que lo que muchos recibieron por boca de él en Moorlands, muchos miles más recibirán a través de la palabra impresa. Vivimos en una época en la que hay un incremento del analfabetismo bíblico –¡entre cristianos!– y si es así en lo referente al Nuevo Testamento ¡cuánto más es así en lo que respecta al Antiguo! Verdaderamente necesitamos la enseñanza, información, dirección y ánimo que este libro provee en una medida muy rica.
Amós, pues, es un punto de partida, y desde un aspecto, y después otro de su profecía estamos llevados, por la mano segura de Cotton, a ver toda esta más amplia y más temprana porción de la Santa Palabra de Dios con el entendimiento y la apreciación acrecentados. Para alguien como yo, que nunca ha estado en Palestina, ha sido una revelación andar con Guillermo a través de los caminos del antiguo Israel y ver el panorama que se abre desde los lugares claves. Pero no sólo la topografía; a través de referencias recogidas de Amós exploramos las instituciones sociales del Antiguo Testamento, su literatura, teología, cultura y vida religiosa. El Antiguo Testamento se trata con toda seriedad y reverencia como la verdadera Palabra de Dios. No se trata de evitar sus problemas, sino que sobre todo sus tesoros son puestos en evidencia con destreza y amplitud.
Si intuyes que siento entusiasmo por este libro, tienes toda la razón.
ALEC MOTYER -
¿Puede la ciencia explicarlo todo?
El pensamiento común en los círculos universitarios y académicos actuales es que la ciencia ha demostrado la inexistencia de Dios y ha convertido en irrelevantes las afirmaciones de la Biblia. Un paradigma que causa graves conflictos de identidad en numerosos estudiantes cristianos, que se ven en la tesitura de tener que compaginar lo que escuchan en la iglesia con lo que aprenden en el aula.
John Lennox, reconocido matemático, científico, filósofo, y escritor cristiano, nos dice:
«He escrito este libro como respuesta a muchos jóvenes y adultos que me han pedido una introducción al debate sobre Dios y la ciencia más accesible que mi libro “¿Ha enterrado la ciencia a Dios?”; y que tratase de forma más concreta la relación entre el cristianismo y la ciencia en lugar de limitarme a las evidencias sobre la existencia de Dios. Espero que este libro responda a sus peticiones».
En sus páginas ofrece una forma novedosa de ver la ciencia y el cristianismo que disipa los conceptos erróneos comunes sobre ambos. Demuestra que no solo no se oponen, sino que pueden y deben ir de la mano para brindarnos una visión integral más completa del universo y el significado de nuestra existencia.
Redactado en términos sencillos, pero sin pecar de simplista, expone hábilmente la racionalidad de las creencias cristianas apoyándose en las evidencias que proporciona la ciencia.
-
Historia Eclesiástica de Eusebio: Siglo I hasta el siglo III
¿Qué sucedió realmente tras la muerte de los apóstoles, testigos privilegiados de Jesucristo? ¿Cómo afrontó el cristianismo la cultura grecorromana? ¿Cuál fue el alcance y significado de las persecuciones? ¿Qué supuso la conversión de Constantino para la Iglesia?
Salvo los túneles de las catacumbas, las reliquias y algunos documentos sueltos, poco nos quedaría para poder conocer e investigar con exactitud los avatares del cristianismo primitivo de forma ordenada, con toda riqueza de detalles, de no haber sido porque la Providencia de Dios levantó, como hace siempre, el hombre adecuado en el momento preciso: Eusebio de Cesarea, considerado «el Padre de la Historia de la Iglesia».
Aunque se desconoce con exactitud su procedencia (su nacimiento se calcula alrededor del año 255 d.C), las primeras referencias que tenemos de el lo colocan en Cesarea (de aquí el apodo que se añade a su nombre), ocupado en las tareas pastorales. Era un hombre amante de los libros, y uno de sus objetivos principales fue ampliar y enriquecer la importante biblioteca que había fundado Origenes en esta ciudad que tenía ya cerca de ¡30.000 volúmenes!, y que fue puesta bajo su cuidado.
Eusebio escribió numerosos libros de apologética, de doctrina y de geografía bíblica –como su famoso «Onomasticón», en el cual hace una relación ordenada de los principales lugares de Palestina y los identifica. Pero su obra magna fue la conocida Historia Eclesiástica, que le consagró como el primer historiador cristiano. La mayor parte de los documentos de patrística, –crónicas y obras apologéticas, escritas durante los 250 primeros años de existencia de la Iglesia para tratar de defenderse de las persecuciones imperiales y contener el avance de herejías nacientes– se hubieran perdido en medio de la situación adversa en que las comunidades cristianas luchaban por sobrevivir, de no haber sido porqué, Eusebio, se dedicó ha realizar un recuento de ellos y a escribir un relato ordenado de los acontecimientos de la Iglesia Primitiva, desde los tiempos de Cristo hasta la época de Constantino.
El propio Eusebio nos explica el plan y propósito de su obra con estas palabras:
«Me he propuesto redactar las sucesiones de los santos apóstoles desde nuestro Salvador hasta nuestros días; cuantos y cuan grandes fueron los acontecimientos que tuvieron lugar según la historia de la Iglesia y quienes fueron distinguidos en su gobierno y dirección en las comunidades mas notables...añadiré a todo esto los incidentes que sobrevinieron a todo el pueblo judío desde el momento de su complot contra nuestro Salvador, y también de los paganos que lucharon contra la palabra divina así como la grandeza de los que en su tiempo atravesaron el martirio. Por tanto daré comienzo a esta obra partiendo de la dispensación de nuestro Salvador y Señor Jesús, el Cristo de Dios...pues quién pretenda redactar los origenes de la historia eclesiástica será necesario que empiece con la primera dispensación de Cristo mismo, ya que de El tenemos el honor de recibir su nombre...así pues, pedimos a Dios su dirección y la ayuda del poder del Señor...ya que hasta el momento presente somos los primeros en entrar en esta labor como intentando seguir un sendero desierto y sin hollar...»
Impresiona pensar que estas palabras fueron escritas por Eusebio apenas tres siglos después de la muerte de Cristo, en una epoca en la que la sangre de los mártires estaba tierna aún en circos y cárceles imperiales.
-
Para entender la teología: Una introducción a la teología cristiana.
Descargar previa
ISBN: 978-84-8267-696-8
Hasta el momento, los Seminarios e Institutos evangélicos contaban como texto para la materia de Introducción a la Teología con dos obras clásicas fundamentales: Introducción a la Teología Sistemática de Louis Berkhof, y la Introducción a la Teología de José Grau, que forma parte del CFT de CLIE.
A partir de ahora pueden añadir una tercera opción: la presente obra del doctor Rigoberto Gálvez, que además de poder codearse justamente con ellas cuenta con dos ventajas importantes: su condición de ser más actual y su perspectiva más latinoamericana. Aporta una definición de teología y una propuesta metodológica que intentan ser integrativas, procurando hallar el justo balance entre la espiritualidad, la investigación, la práctica y el contexto.
Sobre el mismo han dicho:
«En un mundo que cuestiona más y más la fe cristiana, la iglesia necesita de pensadores con vocación teológica. Estas personas entienden el aporte de los teólogos claves del pasado y, a la vez, pueden articular una teología que interactúa con los retos contemporáneos. También tienen el espíritu de un peregrino que vive con humildad la teología que enseña. Rigoberto Gálvez refleja estas cualidades en Para entender la teología e invita al lector a introducirse al proceso de conocer a Dios con más profundidad y compromiso.»
Daniel Carroll R., Ph.D., Profesor de A.T. en el, Denver Theological Seminary, y fundador de IDEAL
«El presente libro ayudará a entender por qué creemos lo que creemos y cómo compartirlo con otros. Despeja muchas dudas que llevamos calladamente.»
Samuel Berberián, Ph.D., Teólogo y educador.
«Un libro con contenido orientador, exhortador y desafiante para la comprensión de una teología cristiana evangélica, tanto para teólogos como interesados en el tema.»
Reverendo Mario Portillo, Pastor Bautista y librero.
«Es un libro que brinda una perspectiva clara y actualizada de lo que es la teología, sobre el sólido fundamento de la palabra de Dios. Refleja el amplio conocimiento teológico y la experiencia de un ministerio pastoral intachable que el autor tiene en su haber persona.»
Luis Dimas Jolón, Psicólogo y teólogo:
«Este libro contiene una teología equilibrada y, al mismo tiempo, es una valiente apologética de la única y verdadera teología: la que se basa en la Sagrada Escritura. Creo firmemente que está destinado a ser un referente permanente hasta la venida gloriosa de nuestro Señor Jesucristo.»
Dr. Luis Fernando Solares B., Pastor y comunicador.
-
11. CURSO DE FORMACIÓN TEOLÓGICA EVANGÉLICA: MINISTROS DE JESUCRISTO
Este libro de José M. Martínez, un líder evangélico formado a los pies de Samuel Vila y ampliamente reconocido como tal en España durante la segunda mitad del siglo xx; autor de numerosos libros y valorado en particular por su HERMENÉUTICA BÍBLICA, fue escrito especialmente como volumen 11 del acreditado CURSO DE FORMACIÓN TEOLÓGICA EVANGÉLICA como texto de formación en seminarios, institutos bíblicos,o en la formación ministerial autodidacta. Plantea con amplitud, pero de manera práctica, el sentido y alcance del término “ministro cristiano” en las áreas de PREDICACION y de PASTORAL y CONSEJERÍA CRISTIANA.Fue publicado en principio como parte del CURSO DE FORMACIÓN TEOLÓGICA EVANGÉLICA en dos volúmenes: uno dedicado a la pastoral y otro a la homilética, que en la presente edición se han unificado manteniendo íntegra la totalidad de su contenido.